Establecida en 1983 (aunque se remonta a 1966, cuando recibió el nombre de Sound of Music), Best Buy es un minorista y proveedor de productos, servicios y soluciones tecnológicas, con más de 1.000 tiendas en los EE. UU., Canadá y México. (En EE. UU., Afirman con orgullo que «más del 70 por ciento de la población vive a menos de 15 minutos de una tienda Best Buy» – vivo a 2 minutos de una, FWIW.) Best Buy es una de las pocas cadenas de ladrillo y cemento que ha logrado sobrevivir a la adquisición minorista de Amazon y logró registrar ingresos de más de $ 42 mil millones en el año fiscal 2018. Ayer, Best Buy presentó un nuevo logotipo. El comunicado de prensa sugiere que fue diseñado internamente.
El viejo logotipo no era grande ni un bastión de ejecución de diseño fino, pero era impresionante e innegablemente eficaz como elemento de escaparate, haciendo que sus tiendas fueran visibles y distinguibles desde una milla de distancia, conduciendo rápido en una carretera. La etiqueta amarilla coincidía con la visualización del precio en la tienda y el fondo azul fue igualado por las ahora famosas camisetas azules de los empleados. El logotipo no era suave, fresco o elegante, era poco atractivo y de aspecto barato, pero lo hizo durante más de 30 años; incluso intentaron reemplazarlo en 2008, pero no funcionó. El nuevo logotipo es mejor desde el punto de vista técnico y estético, con formas de letras más equilibradas: colores más brillantes y un aspecto general más refinado. Hicieron un buen trabajo con la colocación de la etiqueta amarilla, metiéndola debajo de la «Y» con el agujero de la etiqueta funcionando casi como un punto. El mayor desafío que tiene este logotipo, sin embargo, es la cantidad de tiempo que tomará cambiar todas esas tiendas, ¿y en qué van a cambiar? – ya que requerirá una gran inversión de capital para actualizar el faro más eficaz de la marca.
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